Aunque no practiques o te guste el deporte seguramente, en más de una ocasión, habrás oído hablar del taichí. Sin embargo, es probable que no estés del todo seguro de qué se trata, ya que habrás podido ver a gente practicarlo en grupo en una sala u otros practicándolo en soledad al aire libre.
Sea como sea, el taichí es una disciplina deportiva muy popular en todo el mundo, puesto que tiene grandes beneficios físicos y mentales para la persona que lo realiza, de cualquier edad, por lo que cada día son más aquellos que quieren practicar este deporte y sacar el máximo partido a sus beneficios por el bien de su salud, tanto física como mental.
Orígenes del taichí
El taichí es una disciplina deportiva que forma parte de las artes marciales. Fue creada en China, donde también se la conoce como tai chi chuan. Al inicio se quisieron aprender los movimientos de este arte marcial con tal de poder llevar a cabo peleas cuerpo a cuerpo con otros contrincantes, a modo de ataque, pero también como defensa personal.
Lo que hacía más característico a este arte marcial es que podía realizarse con o sin armas, pero que sus movimientos eran más lentos en comparación con el resto. Esto es así porque el taichí quiere darles mucha importancia, ya que a través de la lentitud de sus ejercicios puede conseguir una conexión directa con la meditación, haciendo que estos sean los más acertados y correctamente producidos a la hora de la lucha, para conseguir la deseada victoria.
En la actualidad el taichí se practica como una disciplina deportiva que no está relacionada con las artes marciales, por lo que aquellos que lo llevan a cabo no compiten en peleas ni practican con la lucha cuerpo a cuerpo, sino que, simplemente, se limitan a aprender y a reproducir los movimientos y ejercicios del mismo con tal de poder trabajar su cuerpo y su mente, a través de la mencionada meditación.
Cómo practicar el taichí
Aunque la vestimenta tradicional para practicar el taichí es uno de los típicos trajes populares de China, que consiste de una chaqueta abotonada y unos pantalones largos de un material muy fino y ligero, con un calzado completamente plano de tela con suela de goma, en la actualidad la gente suele realizar estos ejercicios con la ropa que ellos se sientan más cómodos, ya bien sea deportiva con unas zapatillas de deporte o con los pies descalzos.
Antiguamente se podían realizar los ejercicios de esta disciplina con armas, ya que era un arte marcial, por lo que algunos de los complementos que pueden utilizarse a la hora de practicar los movimientos del taichí son los abanicos, una lanza, una vara larga de madera y el sable o la espada china. Este tipo de ejercicios con armas tradicionales suelen utilizarse en las escuelas especializadas y aquellos que realizan taichi por su cuenta al aire libre suelen prescindir de ellos y centrarse, como en la mayoría de los centros donde se imparte, en los movimientos que no requieren más material que el propio cuerpo.
El taichí se centra en los movimientos y ejercicios a realizar. Cree que la lentitud y la corrección de estos movimientos son los que consiguen conectar con la mente, por lo que estás trabajando la conexión entre la mente y el cuerpo cuando realizas esta disciplina deportiva. Al realizar los ejercicios de taichí consigues conectar con tu mente y a través de la meditación puedes relajar el cuerpo, a la vez que eliminas tensiones y nervios que pueden afectar negativamente a tu vida diaria.
Descanso físico y mental
Por eso, es normal que una vez terminada la sesión de taichí, ya bien sea en un gimnasio o realizada por tu cuenta al aire libre, probablemente te sientas mucho más tranquilo y descansado mentalmente, a la vez que notarás que has trabajado tu cuerpo, al tener los músculos en movimiento y en tensión a ratos, consiguiendo tonificar tu figura y también mayor fuerza y flexibilidad.
Es muy importante realizar correctamente los movimientos del taichí si quieres asegurarte de que vas a obtener de ellos los beneficios mencionados. Por eso, si nunca has probado esta disciplina deportiva sería conveniente que aprendieses a realizar sus ejercicios de la mano de un profesional de la misma. Ellos podrán enseñarte a controlar correctamente la respiración, lo cual es clave con tal de poder realizar los ejercicios de forma adecuada y poder conseguir la meditación a través de los mismos.
Los movimientos deben ser fluidos y relajados, pero tu postura deberá ser siempre la correcta para poder evitar lesiones en zonas como las cervicales o las lumbares, las cuales son las que más suelen sufrir mientras se realizan la mayoría de los deportes. La coordinación, la paciencia y el equilibrio serán tres de los principales aspectos que se trabajan mientras se realizan los ejercicios de taichí. Puede que durante los primeros días no te parezca tan sencillo, no puedas realizar los movimientos tan rápido como te gustaría y te cueste meditar y concentrarte pero, poco a poco, con constancia y perseverancia verás como vas aprendiéndolos y llegará un día que podrás realizarlos por tu cuenta y beneficiarte de todo aquello que el taichí puede aportarle a tu salud física y mental.